Candado Crew presenta a:
Ordesa (folk de Salamanca)
La Casa Fantom (Noisecore – Sludgecore de Noruega)
Lo entiendo, pero a ver (Indie Pop, del montón, de Zaragoza)
El concierto tendrá lugar el 21 de Enero, desde las 8 de la tarde, en la Sala Arrebato, Calle Palafox, nº 28.
Los beneficios de este concierto serán destinados a Aliou, mantero en Zaragoza, a quien la «justicia» le exige el pago de casi 14.000 euros a un policía por unas supuestas lesiones durante la detención racista a la que fue sometido.
Desde DDCC os invitamos a asistir, a pasar un buen rato y a colaborar con la causa que planteamos. Agradecemos a Candado Crew y al resto de organizadores que hayan brindado esta oportunidad para conseguir fondos para la caja de resistencia y para denunciar, una vez más, lo sucedido con Aliou y todas las formas de represión y criminalización que se están dando en nuestra sociedad, contra cualquier persona o grupo que no encaja en las normas de un sistema injusto y que no respeta los derechos humanos.
Sobre lo sucedido con Aliou y el contexto y la situación en la que está su realidad:
Un día de abril de 2014, estando junto a varias personas más en la calle Boggiero (barrio de San Pablo), Aliou vio llegar a dos agentes de la PL. Sin motivo aparente, solo él y un amigo fueron separados del grupo. “Venid aquí los dos. Documentación”. Ellos mostraron sus documentos a uno de los policías, este los revisó y, al acabar, en lugar de devolvérselos, los tiró al suelo. Solo el amigo de Aliou respondió: “¡esto no puede ser!”.
El policía acusó a Aliou de llevar un palo con él. Ahí no había ni palo ni nada que se le pareciera, pero le detuvieron y lo llevaron a comisaría. Pasó dos noches en el calabozo, sin intérprete (por supuesto), para salir, como por arte de magia, con una denuncia por atentado contra la autoridad – ¡nada más y nada menos que romper una pierna a uno de los agentes! Estando en el calabozo, el mismo policía siguió repitiéndole: “llevabas un palo”.
Según explica Aliou, se supone que he roto una pierna a un policía con un palo, pero no había ningún palo y yo he visto trabajando a ese mismo policía que no paraba de decirme lo del palo.
Aliou no tenía dinero para contratar los servicios de un abogado e ignoraba la gravedad del problema en que se había visto envuelto – no olvidemos que entre las muchas razones de su confusión se incluye NO HABER HECHO ABSOLUTAMENTE NADA. Para no ser enviado a prisión, acabó viéndose obligado a reconocerse culpable y aceptar, entre multas e indemnizaciones, un pago de 13.630 euros resuelto en acto de conformidad el lunes 16 de mayo por el Juzgado de lo Penal nº1 de Zaragoza.
Insistimos: para evitar una petición de 5 años de cárcel, Aliou acabó reconociendo unos hechos que nunca habían ocurrido y aceptando una “rebaja” de las acusaciones que implica, entre indemnizaciones y multas, el pago de un total de 13.630 euros. El resultado de esa “rebaja” fue, entre multas e indemnizaciones:
1 delito de resistencia (art. 556 CP) = 1.080 euros.
2 delitos de lesiones (art. 147 CP) = 1.080 euros.
1 falta de lesiones (art. 617.1 CP) = 90 euros.
+ agravante de reincidencia (art. 22.8 CP) por resistencia (denunciar por resistencia es poco menos que un recurso utilizado “por defecto” en los abusos cometidos por la PL).
Indemnización de 600 euros a uno de los agentes.
Indemnización de 30 euros a otro.
Indemnización de 10.680 euros al “presunto agredido”.
Indemnización de 82.16 euros al Ayuntamiento de Zaragoza.